En Oxford, en la acera opuesta de Christ Church, donde Lewis Carroll vivió toda su vida adulta, hay una pequeña tienda que vende toda clase de artículos relacionados con el autor y sus obras. No sería más que una tienda de recuerdos, muy bien ubicada, si no fuera porque el establecimiento ya existía en la época de Carroll. Alice Liddell compraba en él, y sirvió de inspiración para la tienda de la Oveja que Tenniel dibujó en A través del espejo. Era en aquel entonces una confitería cuyo producto estrella eran caramelos de cebada, que también se mencionan en Alicia en el País de las Maravillas y siguen vendiéndose en la actualidad con una receta modernizada.
La lista de los recuerdos relacionados con Alicia que allí pueden adquirirse sería muy larga, pero sin duda uno de mis favoritos es uno que obtuve de manera gratuita: un punto de lectura con información y publicidad de la tienda.
Nada del otro mundo… salvo uno de los lados, que sí es de otro mundo. Del Mundo del Espejo, concretamente. Está escrito al revés, de modo que solo se puede leer con comodidad si se coloca frente a un espejo.
Evidentemente, la broma no es improvisada. Carroll tenía una gran afición a escribir en sus cartas informales mensajes al revés, o al revés por partida doble (de modo que solo se pudieran leer frente a un espejo y puestos boca abajo). En A través del espejo hay continuas referencias a que en ese mundo todo funciona al revés (hay que retroceder para llegar a lo que está delante, hay que tomar algo seco para quitarse la sed, hay que vendarse un dedo antes de pincharse) y, tampoco de casualidad, la disposición del interior de la tienda de la Oveja en la ilustración de Tenniel está invertida.
John Tenniel, 1871.
Que lugar tan curioso. Uno de esos rinconcitos del mundo donde parece que la realidad sea más tenue. Atendiendo a la lógica inversa del Espejo, más que entregarte el marcapáginas gratis deberían haberte pagado para que te lo quedaras... pero supongo que incluso la irrealidad tiene sus límites, y que aún viviendo con un pie al otro lado del Espejo, los dueños deben mantener siempre el otro pie a este lado.
ResponderEliminarLa parte de la tienda de la Oveja fue una de las que menos me gustó (realmente, "A través del espejo" no me gustó demasiado), pero me gustaría visitar la tienda, seguro que tienen cosas muy curiosas.
ResponderEliminar¡Bienvenida, Marmota! Es cierto que A través del espejo es bastante irregular, y que los capítulos brillantes se alternan con otros insulsos; es uno de los motivos por los que en las adaptaciones cinematográficas se suelen incluir solamente dos o tres escenas de A través del Espejo. La tienda, por su parte, tiene bastante material normalillo, del que hay en cualquier otra tienda de recuerdos, pero también se pueden encontrar piezas artesanales y diferentes. Cada año que voy me compro solamente una cosa, pero procuro que sea especial.
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